
El último domingo de noviembre, se llevaron a cabo los comicios en Honduras para las elegir gobierno por los próximos cuatro años. Sin embargo, todavía no están disponibles los resultados de la votación porque el Tribunal Supremo Electoral (TSE), encargado de contabilizar los votos demoró una semana en anunciar los resultados en medio de un escenario confuso plagado de sospechas de fraude. El pueblo de Tegucigalpa y otras ciudades salió a la calle en clara protesta para denunciar la manipulación y los manejos en el recuento de votos.
En este escenario, Juan Orlando Hernández, quien súbitamente resultó el candidato vencedor en estas elecciones decretó hace 48 horas el toque de queda para los próximos 10 días a fines de «frenar el caos y la violencia».
Sin embargo, pareciera haber sido el pase libre a una cacería ultraviolenta contra toda persona que desafiara el horario para estar fuera de su casa. Particularmente lxs activistas y defensorxs de derechos humanos a quienes se busca atemorizar, y silenciar mediante la represión ejercida por el Estado.
Compartimos el comunicado de la Iniciativa Mesoamericana de Mujeres Defensoras de Derechos Humanos, advirtiendo sobre la extrema gravedad de este contexto de detenciones arbitrarias, acusaciones sin pruebas y todo tipo de abusos de parte del Estado.